"De aquel estudio infería que los musulmanes andaluces inventaron un sistema estrófico ingeniosísimo, peculiar suyo, de formas poéticas distintas de las clásicas árabes".
Los sistemas musicales de los pueblos musulmanes derivan de los sistemas persas y bizantinos, los cuales fueron heredados a su vez de los de Roma y Atenas. La música árabe tiene algo de griego y romano, el flamenco, algo lleva de igual forma.
Sintetizando de forma tajante, la gran pérdida que tuvo la conservación de la herencia musical está orientada a la edad media. Existió, como en la Andalucía de los ochenta, poco espíritu de perpetuidad.
" Abensaid testifica, y hay que darle crédito, que, en su tiempo, en Bagdag se oían cantar los zéjeles de Abencuzmán con más frecuencia que en Andalucía. Y para llegar a Bagdag es de suponer que se fueran ejecutando por los países intermedios. El hecho, en mi sentir, no ofrece motivos de duda, teniendo en cuenta, sobretodo, la difusión del sistema lírico andaluz".
No hay Boabdil sin Argote de Molina es decir que no hay cantos populares sin cronista.
Para leer: Riemann, Ribera y Tarragó, García Gómez, Gómez Marín, y otros.
