Este primer libro está especialmente recomendado para aquellos que han perdido la fe en cualquier movimiento andaluz. Está dedicado a los tránsfugas, a los vegetales, a los resabiados, a los meapenes (drives), y a los que no hacen una función pública y cobran su salario por ello.
Este otro, en cambio, está dedicado a los publicistas andaluces. A los que promocionan y no congestionan. A Rafael, a su olor a tierra ochavada. Al tiempo que tardaron en escribirlo, sin aludir ni eludirlo. A su respetable persona.
Este otro, en cambio, está dedicado a los publicistas andaluces. A los que promocionan y no congestionan. A Rafael, a su olor a tierra ochavada. Al tiempo que tardaron en escribirlo, sin aludir ni eludirlo. A su respetable persona.