17 marzo, 2012

LA FANTASIAS METROPOLITANAS EN PLATAFORMAS Y LOS PUEBLOS AL LÍMITE




Considerado nuestro propio pasado como caduco y defecante, - que es lo que se practica día a día en la fantasia metropolitana- , los pueblos que no han tenido las manos del progreso urbanistico- Alcalá, Dos Hermanas, Utrera, Burguillos, Arcos, Lepe, otros-, están agonizando entre trampas piadosas para sobrevivir. 

La estratagema del estado en la forma de ayuntamiento ha querido crujir en la sociedad interna con unas desigualdades que serán incurables: los trabajadores rescatados de los planes Feil, Proteja y otros de hoy, saben que trabajan por trabajar, sin otro objetivo que mantener un salario cuyo final conocen a la perfección.  Instrumentalizar la moral ha sido la estrategia de una gobernanza corrupta con los habitantes de nuestros medios rurales, capando inquietud  alguna.

Es hora de una gran levantada sin transición contra esa histórica forma de hacer imperialismo con las consciencias. El campo, el medio rural y los jornaleros ya saben desde siempre sobre "bancos de semillas", "cooperativas integrales", "productos biosostenibles" y "ferias ecológicas". Lo único que falta es poner el oído en la tierra, sin necesidad de tener un curso de "formador de limpieza para casas rurales", ni poyas. Necesitan apoyo.

El capitalismo puede ser bloqueable sin los gobiernos como medida eficaz. Son ellos los que traen el coche eléctrico de esa marca (Renault), con la energía de esa marca (Endesa), con el peaje de esa carretera (AUSSA), y con el bar restaurante (AutoGrill).  Y si hay que negarse a un progeso destructivo para un mundo más habitable, prescindir de ello es la única manera. Claro,  que ¿qué pasa con los marxistas, socialistas o internacionalistas en general?. ¿Quién asumiría los mecanismos destructivos de una tierra con más facilidad, basándonos en la clásica diferencia entre idealismo y materialismo sabiendo el estado de diálisis de esta sociedad hoy?.
 



La ciudad es la cáscara, pero el campo es su grano. 



                                                                                                                                                          


Fragmento de entrevista en revista Nación Andaluza Nº 5.

José Luis Carrascosa Pulido: (...) ¿No ha llegado el momento de levantarse y decir vamos a empezar  por nosotros mismos, vamos a ser lo que somos, con la cabeza alta?
Antonio Gala: Sí, Si.  No sólo creo que ha llegado ese momento, sino que ha llegado hace muchísimo tiempo. Pero quizá la ocasión ahora sea, a lo mejor, irrepetible. Y es profundamente necesario que no nos conformemos sólo con el sentido administrativo y político de la actual autonomía, sino con el cultural, previo a los anteriores (...).