02 noviembre, 2006

IMPRODUCTIVIDAD Y EMPRESAS PIRATAS PARA WEBS INÚTILES





El vocal de nuevas tecnologías de la AEA, Narciso Sánchez, administrador de Publidisa, firma a cargo del proyecto de Cultura y destina 178.000 euros a la Asociación de Editores de Andalucía para que la empresa de uno de los miembros de su Junta Directiva renueve una página web improductiva.

www.biblioandalucía.com, que todavía está en obras, ha sido un fracaso comercial.

Proyecto ‘estrella’ que la consejera Rosa Torres ‘vendió’ en el Parlamento Andaluz mediante una autopregunta y que presentará en la Feria de Guadalajara (México)


31/10/06 MÁLAGA. El proyecto para comercializar libros por Internet, uno de los objetivos prioritarios del Pacto Andaluz por el Libro e iniciativa estrella a presentar en la próxima Feria del Libro de Guadalajara (México), oculta un confuso y turbio caso de abultado trasiego de dinero público entre la Consejería de Cultura de la Junta y la Asociación de Editores de Andalucía (AEA). Según ha comprobado
EL OBSERVADOR / www.revistaelobservador.com, Publidisa, la empresa de la que es administrador el vocal de nuevas tecnologías de la AEA, Narciso Sánchez, es la firma encargada de renovar los contenidos de la página web www.biblioandalucía.com, actualmente en construcción y perteneciente a la AEA. El programa para componer esta biblioteca digital de 1.000 libros cuenta con una inversión que asciende a 178.000 euros (casi 30 millones de pesetas) según afirma Rosa Torres, actual consejera de Cultura. Algunas empresas de creación de páginas web consultadas por esta revista aseguran que hacer un portal cibernético de estas características cuesta unos 5.000 euros a lo sumo.
EL proyecto Biblioandalucía arranca con gran pompa y boato en 2001 cuando la entonces consejera de Cultura de la Junta de Andalucía y hoy ministra del mismo ramo en el gobierno de Zapatero, Carmen Calvo, anuncia la creación de la “primera biblioteca virtual de España”. Una iniciativa que ponía a la venta libros de las editoriales asociadas a la AEA e incluía “las publicaciones de las distintas consejerías de la Junta, del Servicio de Publicaciones de las universidades y de las diputaciones provinciales”, según explicaba la propia Calvo.

A la cabeza de Biblioandalucía S. L. figuraban (y figuran) los miembros de la Junta de Directiva de la AEA que se han distinguido por acaparar buena parte de las ayudas económicas a la edición que otorga cada año el Gobierno andaluz: como presidente se inscribe Jesús Peláez (Editorial El Almendro), en aquel entonces presidente a su vez de la AEA, y como consejeros delegados están el vicepresidente Francisco Argüelles (Editorial Arguval) y el hoy
Imagen que aparece en la página web de Biblioandaluciapresidente José María Arranz (Editorial Miguel Sánchez). El montante de ayudas públicas recibidas para este proyecto inicial fue considerable, además de concurrir en él una particular circunstancia: Biblioandalucía se constituyó como una sociedad limitada, y su junta directiva la componen los miembros de la también junta directiva de la AEA.

EL salto a la distribución digital de las editoriales andaluzas ha resultado ser hasta el momento económicamente desastroso. Atendiendo al balance y a la cuenta de resultados del Registro Mercantil el resultado final de Biblioandalucía S.L. en 2004 fue de 397,41 euros (sí, algo más de trescientos euros de beneficio), con una evolución negativa de -88,54% respecto a 2003. Según este mismo informe los gastos en 2004 de esta empresa en la que figura un solo empleado fueron de 37.622,21 euros incluyendo gastos de personal, salarios y gastos de explotación, entre otras partidas.

ESTOS números, lejos de provocar desánimo no impiden que en 2002, Jesús Peláez, presidente de la AEA, adelante en unas jornadas en Cádiz la intención de publicar en formato digital 1.000 libros de sus asociados. Afirma Peláez que el presupuesto para este programa estará en torno a los 90.000 euros y añade que no será difícil conseguir este dinero, pues “las administraciones se implicarán sin duda en una iniciativa como esta”, tal y como recoge el Boletín de la Sociedad Andaluza de Bibliotecarios.

NO se equivocaba Peláez. En marzo de este año la Consejería de Cultura de la Junta, a través de la Dirección General del Libro y del Patrimonio Bibliográfico, firma un convenio con la AEA para la puesta en marcha de una plataforma tecnológica, que bajo el nombre Biblioandalucía XXI permitirá disponer de 1.000 publicaciones andaluzas digitalizadas a texto completo. La directora general del Libro y del Patrimonio Bibliográfico y Documental, Rafaela Valenzuela, explica que esta plataforma, que se enmarca dentro del Pacto Andaluz por el Libro, cuenta con un presupuesto de 150.000 euros, tal y como recogen,
Rafaela Valenzuelaentre otros, el Diario de Córdoba.

EL pasado 11 de octubre, en el Parlamento Andaluz y a instancia de una autopregunta del grupo socialista, la consejera de Cultura Rosa Torres anuncia que el proyecto Biblioandalucía XXI se presentará al público en la próxima Feria Internacional del Libro de Guadalajara (México). En el ABC Sevilla del día 15 de octubre, la misma Torres puntualiza que la inversión para este programa asciende a 178.000 euros.

PARA llevar a cabo esta renovación y ampliación de contenidos de
www.biblioandalucia.com no se ha realizado ningún concurso público empresarial. Atendiendo a las declaraciones de dos editores de la AEA (que prefieren no figurar en esta noticia por miedo a quedarse sin subvenciones a la edición que otorga el gobierno andaluz) fue Narciso Sánchez, vocal de nuevas tecnologías de la asociación, representante de la editorial sevillana Mad y administrador de la empresa Publidisa quien se ofreció a realizar este trabajo dada su experiencia en esta última compañía. Publidisa es una emergente empresa especializada en la publicación digital de e-books que desde que se constituyó en 2001 ha aumentado sus ventas hasta 3.744.020,28 euros en 2004.

SEGÚN corroboran estos mismo dos editores, la asignación a Publidisa de los 178.000 euros para renovar la web de Biblioandalucia tampoco fue discutida en ninguna asamblea de la AEA. De hecho, la vocalía de nuevas tecnologías no existía hasta comienzos de verano de 2005 cuando se creo este cargo. Nada sabían los socios hasta que en la junta general ordinaria de diciembre de 2005 se comunicó oficialmente que Narciso Sánchez pasaba a formar parte del equipo directivo de la asociación como vocal de nuevas tecnologías. “Lo tenían todo atado ya”, dice uno de estos editores.
Rosa Torres

ESTE medio de comunicación ha consultado a algunas empresas del sector de creación de páginas web cuánto costaría hacer un portal de Internet de estas características. Los presupuestos oscilan entre los 1.500 y los 5.000 euros.

Fuente: Revista El Observador: www.revistaelobservador.com.